Este post puede herir suceptibilidades, queda advertido.
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Su cuarto nombre es Zeus |
Trabajo en un entorno multicultural en el que tengo que lidiar con nombres de otras lenguas, para mí impronunciables, y en otras ocasiones extraños e ilógicos. En estos días apareció una mujer de origen árabe cuyo nombre es "
Superviser". Empecé a hablar con la contadora que es canadiense, anglófona y judía, sobre la "culturalidad" de los nombres y llegué a la tradición -menos mal en desuso - de utilizar el santoral católico para nombrar a los hijos.
Sin ir muy lejos, al parecer mi papá figura en su partida de bautismo como N.D. del Niño Jesús L.A. porque nació en una fecha próxima a la Navidad. Curioso como siempre quise saber si mi nombre obedecía al santoral, que es algo distinto al "día de tu santo". Mi santo sería San José, cuya fecha de celebración es el 19 de marzo según el santoral Romano, el domingo siguiente a la Navidad en el Bizantino, el 3 de enero en el Mozárabe o el 1 de mayo, porque se considera San José Obrero (fiesta del trabajo).
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Como para que conste un nombre cristiano |
Pero eso realmente me tiene sin cuidado. Lo que me tiene consternado es que si mis padres hubieran tenido en cuenta el
santoral católico para nombrarme, el descalabro hubiera sido enorme. Gracias a ellos tengo un nombre común en mi cultura hispana.
El primero en figurar el 4 de enero es un obispo cuyo mayor mérito fue construir una escuela y salvarle la vida a un esclavo fugitivo para luego escaparse para otra ciudad, pues la situación política era adversa para los obispos de la época. Si a medir méritos vamos, santo Oscar Schindler o Mahadma Gandhi. Volvamos a los nombres.
Este francés que aparece encabezando la lista del santoral el 4 de enero se llama:
(En francés Aprencule)
No puedo entender cómo es posible que exista un nombre así en español. Ese sustantivo me ha hecho pensar en la cantidad de nombres de broma que se inventa la gente, caso Alan Brito, Elba Cano o Rosa Melano. No está bien reírse de las cuestiones religiosas ni de los nombres de la gente, pero soy incapaz de pronunciar este nombre y quedarme tan serio como una estatua de mausoleo.
Podría ser un pseudónimo - pensé yo - pero busque en Google y varias fuentes confirmaron la existencia y validez de "Abrúnculo". ¿Qué tal que la familia Gordillo que sigue la tradición del santoral tenga un vástago el 4 de enero? ¿Y que el apellido materno sea Serrano? Su destino sería la proctología.
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En inglés también ocurre |
Es cuestión de tiempos y espacios, seguramente en el Siglo V nombres como Natalia o Lina eran abominables, para ellos eran comunes Sidonio Apolinar, Gundebaldo, Chilperico y por supuesto Abrúnculo. Hay nombres que se ponen de moda y son tendencia gracias a fenómenos de mercadeo o personajes célebres. Hoy en día hay valerias y valentinas, mateos y migueles, gregorios y martinas; ya escasean rosalbas y azucenas y joaquines y hernandos... entre nombres que pudiéramos entender como comunes.
Jaredia y Angetritis eran tías de una persona muy querida, cuyo nombre también es fuera de lo común. La
gente arma unos combinados extraños o toma "nombres" de vocablos extranjeros como el famoso Usnavy o Yusnavy (
US Navy), Jaider (
hi there), Maguiver y los ya conocidos
Batman Roberto y Pink Floyd Flash. Mi pseudónimo de internet (originalmente para un personaje de Calabozos y Dragones) fue tomado al azar de una lista de sintocayos publicada en una revista Cromos en la década de los 80, cuando
Jorge Barón tenía un concurso de nombres raros: Yuvarsi, pero si hago una búsqueda Google (.ca) me sugiere corregir por Yuvasri, que es un nombre de mujer hindú, de manera pues que el padre o la madre de ese sintocayo quizá captó el nombre en alguna cinta bollyhoodense.
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Cuando los apellidos combinan con sentido |
Según la Registraduría Nacional de Colombia, 1'691.862* (3.64% aprox.) nacionales no tenían tocayo en el país en 2010. A los indígenas de la Guajira algunos funcionarios de esta institución resolvieron castellanizar sus nombres wayuu para dotarlos de ciudadanía y los nombraron de maneras irrespetuosas con nombres de animales, cosas o simples apodos (
ver artículo). Por fortuna ese atropello está siendo corregido.
Sin embargo hay quienes optan libremente por nombrarse "distinto" haciendo honor a sus aficiones. Don Deportivo Independiente Medellín Giraldo Zuluaga, para sus amigos y allegados "Medallo", no aguantó más un nombre cristiano y se oficializó como tal porque entre otras cosas, la Ley colombiana lo permite. Para él no basta con cambiarse el nombre, ha comprometido así a su perro y a algunos familiares, como reza en
un artículo de El Tiempo. Si quiere que Medallo le muestre su cédula, búsquelo en las secretarías de tránsito del Valle de Aburrá, es tramitador. Yo supe de su existencia porque alguna vez Marco Antonio -que estaba en la compra de una moto- apareció con fotocopias contando el cuento, pero esa es otra historia…
*Nuestra Huella, Edición Nº 46, Año IV. Diciembre de 2010
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