20 ene 2017

El hombre nace ateo y la sociedad lo convierte

En una de esas discusiones interesantes que raramente se presentan en Facebook, alguien argumentaba que nadie nace ateo, pero mi opinión es exactamente la contraria: todo el mundo nace ateo.

Me gustaría conocer esos documentos en los que se describen los hallazgos de niños salvajes, esos "tarzanes" que han aparecido en sitios perdidos criados por primates y hasta pájaros. Quisiera saber si esos documentos, en caso de existir, tal vez registraron alguna inclinación del protagonista por cuestiones esotéricas y trascendentes. Lo poco que se puede saber, es que esos niños han adoptado comportamientos animales, ya sea por imitación o por supervivencia.
(…) el "niño de Aveyron" tenía costras en la piel, estaba infestado de pulgas y piojos, y prácticamente no caminaba erguido, sino a cuatro patas. Además, no mostraba el menor interés en comunicarse con los humanos y nunca aprendió a hablar, más allá de unas pocas palabras. Crecer aislado en los bosques alteró su desarrollo cognitivo, y fue completamente imposible integrarlo en la sociedad.
Durante al menos tres años, científicos y educadores franceses intentaron reconducirlo, pero fue imposible. Cuando perdieron toda esperanza, alojaron al niño en casa del ama de llaves del jefe de los educadores, y esa mujer recibió una asignación mensual del Gobierno francés para ocuparse del chico. Finalmente, el "niño de Aveyron" murió con 40 años, sin haberse integrado nunca en el mundo civilizado, y víctima de su siempre delicada salud.
Como se ve en este caso, el lenguaje de Victor, como se llamó a este niño, fue una tara insalvable porque no contó con el ejemplo y la enseñanza en sus años de desarrollo cognitivo. Un rasgo distintivo de muchísimos animales es la comunicación, y en los humanos especialmente, el lenguaje articulado, que requiere de una elaboración cognitiva complicada y exige un cerebro Homo Sapiens Sapiens. Pero ni aún dotado de este cerebro, pese a los esfuerzos científicos y quizá debido a las enfermedades, Victor jamás pudo comunicarse "humanamente". No pudo aprender a hablar, algo que normalmente viene de fábrica en nosotros.

Así como el lenguaje materno, el aprendizaje de otros idiomas o lenguajes requiere de un esfuerzo individual y la exposición de la persona a lo nuevo. Aunque se han reportado casos en los que extrañamente una persona que sufre trauma cerebral resulta hablando lenguas extranjeras de la noche a la mañana, no es una certeza científica que esos individuos jamás hayan estado expuestos al nuevo idioma. Se presume que en la memoria inconciente ha quedado calado ese lenguaje sin que el sujeto lo pudiera controlar, y por el trauma, un detonante misterioso hace aflorar el nuevo idioma.

Por milagros, o por posesiones espirituales, ha habido personajes que resultan "hablando en lenguas", pero esas lenguas no son más que jeringonza para impresionar en ritos espiritistas.

Como el lenguaje, las religiones son elementos que exigen ser enseñados y aprendidos dentro de un contexto sociocultural determinado. Nuestro cerebro está dotado biológicamente para el aprendizaje, entre otras cosas, del lenguaje: la articulación de sonidos y fonemas que involucra órganos y músculos del cuerpo como las cuerdas vocales, los labios, la garganta, la lengua y los pulmones, entre otros, del aparato fonador. Ese mismo aparato está en cualquier cuerpo humano corriente, pero no trae en su programación genética, las instrucciones para utilizar coherentemente un lenguaje determinado, en otras palabras, mi aparato fonador no viene programado para que yo hable español, de hecho, aprendí además inglés y francés sin necesidad de hacer injertos en mis cuerdas vocales, simplemente agregar más conocimiento y práctica a mi cerebro. En Canadá existen programas de adopción internacional que permiten a los padres con deseos de adoptar niños extranjeros, hacerlo desde Asia. Niños chinos, vietnamitas, nepaleses; los bebés llegan a Canadá con sus nuevas familias anglófonas o francófonas y ninguno sale hablando chino, vietnamita ni nepalés.

Distribución de credos en Canadá
Tal cual es con las religiones, con la enorme salvedad de que hasta donde sabemos, no existe ningún órgano ni hormona que controle los impulsos o creencias religiosas, a excepción, claro, del cerebro. Las estructuras dogmáticas pertenecen a los contextos culturales, no necesariamente tradicionales de una sociedad y no existe ningún indicio de que éstos sean innatos. Teniendo en cuenta la explicación del lenguaje y los niños adoptados, esos niños tampoco llegaron a Canadá siendo budistas, musulmanes, cristianos, ni nada. A pesar de que este país es actualmente mayoritariamente cristiano (con todas sus distintas sectas), alberga otros credos importados por la población inmigrante que culturalmente transmitirá esa herencia a sus descendientes, pero ese niño adoptado en China, viviendo con padres de quién sabe qué religión en Canadá, va a practicar esa religión que le enseñen y no otra, aunque aquí esté disponible la nativa de su país.

Tampoco es necesario transplantarse un órgano para aprender un idioma ni una religión, ésta es una creencia, pertenece a una estructura dogmática y requiere de fe, que no tiene en absoluto, ninguna implicación biológica ni anatómica en nadie. Los rasgos fenotípicos no están sujetos a la antropología social. El niño chino tiene apariencia de chino, o japonés, o coreano; pero no de busdista ni musulmán; a no ser que se le vista y ubique en un contexto que permita identificarlo como tal. Los Sijs tienen un fenotipo distintivo que unido a su manera particular de adoptar la religión los hace plenamente identificables, pero si el hombre se quita la barba, se corta el pelo y se quita el turbante y el kirpán, podría pasar por mestizo latinoamericano o por habitante del Magreb.

Físicamente no se necesita extirpar niungún tejido para abandonar una religión o adoptar otra por propia voluntad. Es un proceso de reestructuración de conceptos abstractos variables que en ocasiones drásticas requiere de un "lavado cerebral" y en otras la simple necesidad del individuo de integrarse a un determinado grupo y adaptarse a nuevas prácticas/dogmas. Quien cambia drástica o levemente de religión no está modificando su carga genética ni su anatomía, solamente esa estructura de creencias y prácticas de su entorno. Tampoco fue ni será posible determinar si en la concepción y el nacimiento, una persona en el futuro habrá de convertirse de un credo a otro o de apostatar definitivamente, así como se puede ver en un ultrasonido si el embrión habrá de tener malformaciones o problemas genéticos futuros. No es innata tampoco la profesión o las artes, todo lo que es cultural, se aprende y desarrolla. Biológicamente es posible el mestizaje, pero religiosamente no. Si una pareja se compone de un blanco judío con una negra católica, es muy posible que nazca un mulato, pero no un mulato jutólico.

Me decía esta persona que la gente no nace atea, sino "neutra", o sea, como una hoja en blanco que se escribe con el crecimiento cultural, pero ese es el mismo proceso con cualquier aprendizaje, como las matemáticas o la poesía. "Volverse ateo" no es borrar esas páginas escritas con aprendizajes o "neutralizarse" para nuevos conceptos, cada uno tiene un proceso individual particular que se alimenta por la reflexión, el conocimiento y la experiencia personal, pero esa es otra historia…



Referencias:
http://www.eitb.eus/es/television/programas/la-noche-de/detalle/4260956/el-caso-nino-aveyron-tarzan-peliculas/
http://lavozdelmuro.net/9-casos-reales-de-ninos-criados-por-animales-y-la-espectacular-historia-del-nino-salvaje-espanol/
*https://www.wolframalpha.com
Distribución de credos en Canadá: 
Cristianismo 77%
Islam 1.70%
Judaísmo 1.30%
Hinduismo 1%
Zoroastrismo 0.08%
Universalismo chino 2%
Budismo 1.20%
Religiones étnicas 0.04%
Sijismo 1%
Espiritismo 0.04%
Bahaísmo 0.09%

Ateos o indeterminados 15%